Expresar pesar por el fallecimiento del Dr. Emilio Juan Gimeno, destacado científico en el ámbito de la sanidad animal, con una vasta trayectoria académica, importantes logros en su paso por la función pública como Presidente del SENASA y reconocimiento internacional.

Señor presidente:

El pasado 14 de febrero falleció el Dr. Emilio Juan Gimeno, científico argentino con una destacada trayectoria y reconocimiento mundial en el ámbito de la sanidad animal, quien llegó a ocupar importantes cargos tanto en el plano nacional como internacional.

Gimeno se graduó en el año 1953 de Doctor en Veterinaria en la Universidad Nacional de La Plata. Allí ejerció la docencia durante 40 años, siendo desde Jefe de Trabajos Prácticos de Enfermedades Infecciosas hasta Profesor Emérito en Salud Pública Veterinaria de 1970 a 1995, previo cumplimiento de toda la escala docente desde 1956, llegando a ser Decano de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata, entre 1972 y 1974.

Además, contaba con posgrados en las Universidades de Wisconsin y Aubern (Estados Unidos) y, al momento de muerte, era Académico de Número en la Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria.

Asimismo, el Dr. Gimeno ejerció en dos oportunidades la presidencia del SENASA, la primera durante el gobierno del Presidente Dr. Arturo Illia y bajo la gestión del Ing. Agr. Walter Kugler en la entonces Secretaría de Estado de Agricultura, Ganadería y Pesca; y, posteriormente durante la administración del Presidente Dr. Raúl Alfonsín.

Caben destacar entre sus logros de gestión la construcción del Laboratorio Nacional del SENASA en Martínez y la redacción del Reglamento de Productos, Subproductos y Derivados de Origen Animal, hoy incorporado al Código Alimentario Argentino.

Dicha normativa, aún vigente, constituyó la base fundamental de la Inspección de Alimentos en todo el país, y faculta en forma exclusiva al SENASA para regular el control de alimentos en toda la cadena de productos de origen animal.

Durante la década del 90´ fue Presidente de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), con sede en París, y Presidente Honorario de la OIE hasta momento de su muerte. Asimismo, fue quien creó y presidió la Comisión de Medicamentos Veterinarios de la OIE (1985-1999). Luego, por sus contribuciones en el ámbito académico fue Coordinador de la Representación Regional de la OIE para las Américas con sede en Buenos Aires, desde 1997 hasta 2013, y Consultor Internacional en varias oportunidades de OPS/OMS, IICA y OIE, cumpliendo misiones en casi todos los países de América, Australia, Israel, Japón y Sudáfrica desde 1970.

En la lucha contra la Fiebre Aftosa, el Dr. Gimeno fue el primero en utilizar las variantes de campo para ser incluidas en las vacunas, con el propósito de lograr mejor inmunidad. En materia de BSE o Vaca Loca, coordinó y colaboró en los primeros relevamientos realizados en el país para demostrar la inexistencia de esa enfermedad en los años 1990.

Al respecto, cabe señalar que recibió en 2014 la Medalla de Oro por sus trabajos en Fiebre Aftosa, Vaca Loca y Fiebre Aviar; premio que se entrega anualmente a personalidades de relevancia mundial.

Autor y coautor de más de cien trabajos de orden científico-técnico, se especializó principalmente en temas tales como Fiebre Aftosa, Epidemiología, Sanidad Alimentaria, Educación Veterinaria, etc., presentadas en publicaciones y congresos en Argentina, Brasil, Estados Unidos, Francia, Paraguay y Uruguay. Incluso fue el responsable de modificar el Código Zoosanitario Internacional, marcando un antes y un después en el mercado de carnes en la Argentina frente a la aparición de la Aftosa ya que, a partir de esta modificación, frente a un foco infeccioso, se circunscribe la zona afectada y no todo el territorio argentino permitiendo que el país siga exportando a excepción de la zona infectada.

Sin lugar a dudas, los avances y logros del Dr. Emilio Juan Gimeno, han constituido no sólo un progreso importante para la vida científica de nuestro país sino también la influencia del mismo en su aplicación para el desarrollo económico de la producción vacuna siendo éste de suma importancia para la Argentina.

En tal sentido, por todo lo hasta aquí expuesto, solicito a mis pares acompañen la sanción del presente proyecto.