Su repudio y rechazo a ante los hechos de represión policial que derivaron en lesiones y daños a trabajadores de distintos medios gráficos de la Provincia de San Luis durante la cobertura de una manifestación de ATE que reclamaba por la reincorporación de trabajadoras despedidas.

Señor presidente:

Como he afirmado en ocasiones previas, el ejercicio de la libertad de expresión y del periodismo gráfico constituyen uno de los elementos básicos de la democracia republicana y la vida en sociedad respetando la diversidad de opiniones y pensamiento.

En una nueva ocasión el ejercicio del periodismo y la comunicación de la información se ve restringido o violentado, por razones que hace tiempo la sociedad determino dejar en el pasado, tales como, la represión policial y la violencia del Estado en el curso de manifestaciones de la índole que fuere.

Para este caso en particular, la manifestación que movilizo a distintos trabajadores de ATE en repudio a los despidos de dos trabajadoras, termino con represión policial y el uso de gas pimienta afectando al grueso de la manifestación, y en especial, a los periodistas y trabajadores de medios gráficos que estaban allí cubriendo dicha situación. Aquellos manifestantes que lograron acceder a la Municipalidad capitalina, fueron echados de mesa de entrada de la Comuna por la Guardia Urbana .

A los golpes y con gas pimienta, unos 20 afiliados fueron agredidos por parte de los funcionarios municipales y en el curso de esas acciones es que, sin avizorar ni discriminar entre los manifestantes y los trabajadores gráficos y de prensa, la policía actuó sin tapujos. Los momentos de tensión han quedado registrados y ya se puede visualizar en las redes sociales las agresiones que sufrieron todos los allí presentes. Posteriormente, los trabajadores y manifestantes de ATE denunciaron en sede judicial la persecución sindical que su gremio está sufriendo.

El ejercicio de los derechos consagrados en la Constitución Nacional referidos a la libertad de reunión, manifestación, y por sobre todo, la libertad de prensa y el ejercicio de informar a la población requieren una sigilosa vigilia y protección por parte de esta Cámara. El accionar violento y represivo manifiesta el miedo a las ideas y pensamientos de los demás.

En la última asamblea efectuada por la SIP (Sociedad Interamericana de Prensa) se determinó el nivel de hostilidad al que se ven expuesto los periodistas y trabajadores gráficos en la República Argentina. Sin dudas, este es un nuevo hecho que afirma esta declaración.

Por todos los motivos expuestos previamente, es que solicito a mis pares el acompañamiento del presente proyecto.