


En una nueva jornada de exposiciones ante la Comisión Bicameral Investigadora sobre la “Desaparición, Búsqueda y Operaciones de Rescate del ARA San Juan”, el director general de Inteligencia de la Armada, el contraalmirante Pedro Galardi, afirmó que “hicimos todo lo que estaba a nuestro alcance, pero hoy, viéndolo desde la perspectiva de las familias, seguramente fue insuficiente y nada sustituye la ausencia y la pérdida”.
Ante la pregunta del vicepresidente de la Bicameral, el diputado Guillermo Montenegro, acerca de cuáles eran sus responsabilidades y qué acciones llevaron a cabo desde su área, el contraalmirante Galardi, quien al momento del hecho ocupaba el cargo de director general del Personal y Bienestar de la Armada, expresó que “nuestra prioridad fue ayudar a los familiares de los tripulantes, facilitándoles todos los trámites y así evitarles demoraras e inconvenientes”.
“Al comienzo, lo principal era encontrarlos. Luego, con el avance de las noticias sobre lo sucedido con el submarino, empezamos a colaborar con las familias”, sostuvo Galardi. “Ayudé de la misma manera que me gustaría que ayuden a mi familia si algo así me ocurriera”, afirmó.
“Impulsamos el envío de psicólogos, atención sanitaria y de emergencia para los seres queridos de los tripulantes; relevamos la situación administrativa de cada familia en la Armada, como por ejemplo que no faltara el pago de sueldos; buscamos que tengan herramientas informativas precisas, respetando la sensibilidad de cada familia; y redactamos el decreto que luego firmó el Presidente de la Nación de ayuda social a los hijos de los tripulantes”, especificó Galardi sobre cuáles fueron las acciones llevadas a cabo desde la Dirección General de Personal.
El suboficial primero de la Armada Rubén Espínola explicó, a su turno, que el 15 de noviembre de 2017, a las 8 de la mañana, cubrió su puesto de guardia como supervisor de comunicaciones de la Base Naval Mar del Plata. “A las 14:18 del día en que se perdió contacto con el San Juan escuché por tres frecuencias distintas emisiones cifradas del submarino”, detalló.
En primera instancia -reconoció el suboficial primero- “no dejé asentada la novedad en el libro de guardia por no haber tenido enlace real. Fue recién el sábado 18 que lo registré en forma tardía para dejar constancia del supuesto contacto del ARA San Juan”, explicó Espínola.
La comisión se comprometió a solicitar mayor información, a partir del testimonio vertido por Espínola, sobre lo acontecido el día de la desaparición del submarino ARA San Juan en las otras estaciones de comunicación, para certificar si recibieron comunicaciones o no.
En tanto, los familiares de los tripulantes presentes criticaron a la Armada por la atención que reciben y exigieron “conocer toda la verdad” sobre lo sucedido con el submarino.